La Hermandad está consagrada a la Santísima Trinidad para la extensión de su Reino entre los hombres. El carácter “militante” de esta fraternidad le hace no sólo procurar la extensión del Reinado de Dios, sino además, defender sus valores en caso necesario. Por esta razón, los Caballeros Trinitarios se ponen al servicio de la Iglesia Católica y se declaran hijos fieles de la misma, sin que esto haga disminuir su carácter ecuménico. Antes bien, buscan agregar igualmente a cristianos ortodoxos y anglicanos con el objeto de “luchar en fraternidad” por el Evangelio y la extensión del Reino de Cristo. Esta «lucha» es más que una acción espiritual como la oración. Implica el compromiso social y una incidencia concreta en las realidades temporales a fin de impregnarlas con los valores evangélicos.

La finalidad de extender el Reino de Dios entre los hombres comporta una doble realización del Reino: hacer que Cristo reine en la propia persona y hacer que reine en la sociedad humana.
El Reinado de Cristo en cada persona
Para que Cristo reine en el mundo, es necesario primero que reine en cada individuo. Todo caballero o dama de la fraternidad ha de procurar que Cristo reine en su propia vida mediante la propia conversión, procurando una vida de santidad, que es entendida como una vida de “excelencia”. El acto de “donación”4 que se realiza el día de la investidura5 , quiere significar una entrega y sumisión de la propia persona al Señorío y Reinado de Jesucristo.
Reinado de Cristo en la sociedad
Teniendo como presupuesto que Cristo mismo ha querido venir a enseñar y sembrar el Reino de Dios, y que este “reinado” es causa de felicidad (bienaventuranza) para el género humano, la Hermandad se empeña en que la instauración de este Reinado de la Trinidad no sólo se quede en el ámbito personal y privado, sino que arraigue y se manifieste en la vida pública y civil, en todos los ámbitos posibles de la sociedad.
Notas y referencias:
4. Donación es el acto en el que el «escudero» o «escudera», emitiendo sus promesas, se entrega o «dona» al servicio de la Hermandad.
5. La Investidura, ceremonia también llamada «cruzamiento e investidura», y que incluye el acto de donación, es la celebración ritual en la que el candidato o escudero entra a formar parte de la fraternidad como miembro efectivo.